Israel bombardea al equipo negociador de Hamas en Qatar

El ejército israelí ha bombardeado este martes Doha, la capital de Qatar, en un ataque de "precisión", según el Estado mayor israelí, que tenía como objetivo a importantes líderes de Hamas. Las propias Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reivindicaron el ataque minutos después de que tuvieran lugar hasta 10 explosiones en Doha, concretamente en el barrio de Katara.
Se trata del primer bombardeo directo del ejército hebreo contra el país árabe, después de que en las últimas 24 horas llevaron a cabo ataques en Gaza, el Líbano y Siria, causando decenas de víctimas mortales. La flotilla humanitaria internacional que pretende llevar ayuda humanitaria a Gaza, también asegura haber sido atacada por un dron israelí en Túnez. Imágenes de la emisora Al Jazeera -con sede en Doha- muestran columnas de humo en varias zonas de la ciudad. "Los miembros de la cúpula atacada habían liderado las actividades de la organización terrorista durante años y son directamente responsables de la masacre del 7 de octubre y de la gestión de la guerra contra el Estado de Israel", han asegurado en un comunicado las FDI.
Poco después, la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que su país asume "toda la responsabilidad" del ataque. "La acción de hoy contra los principales cabecillas terroristas de Hamas fue una operación israelí totalmente independiente. Israel la inició y la llevó a cabo", señala la nota.
Según reveló una fuente de Hamas a la emisora Al Jazeera, el ataque tuvo como objetivo la delegación negociadora del grupo palestino en Doha. El equipo negociador estaba encabezado por Khalil al Hayya, jefe adjunto de Hamas, que habría salido ileso en el ataque, según aseguró la fuente. Suhail al Hindi, otro miembro de la oficina política de Hamás, reveló que el hijo de Hayya, Human; y uno de sus principales asesores, murieron en el ataque, así como otros tres miembros.
El bombardeo se produjo mientras los militantes discutían la propuesta de alto el fuego que puso recientemente sobre la mesa el presidente estadounidense, Donald Trump. En el bombardeo murió un miembro de las fuerzas de seguridad de Qatar, según anunció el ministerio del Interior del país.
El portavoz del ministerio de Exteriores qatarí, Majed al Ansari, emitió una "condena enérgica del cobarde ataque" israelí, que calificó de "flagrante violación de todas las leyes y normas internacionales". "[Qatar] no tolerará esta conducta imprudente de Israel ni la continua perturbación de la seguridad regional", aseguró Ansari, tras anunciar que las autoridades de su país iniciaron una investigación al más alto nivel para aclarar lo sucedido y garantizar la seguridad de los civiles de la zona.
Fuentes israelíes aseguran que Estados Unidos -que tiene la mayor base aérea de la región en Qatar- dio luz verde al bombardeo, bautizado como Operación cumbre de fuego. Por el momento, Washington no se ha pronunciado sobre el ataque. Sin embargo, la embajada estadounidense en Doha declaró haber "establecido una orden de confinamiento en sus instalaciones". "Se recomienda a los ciudadanos estadounidenses que se confinen en sus hogares", señaló en un comunicado la misión diplomática.
En una intervención televisada, Netanyahu aseguró que el bombardeo "puede abrir la puerta al fin de la guerra en Gaza". "Se ha acabado el tiempo en que los líderes terroristas gozan de inmunidad en lugares determinados", aseguró. El mandatario declaró que Israel asume la "responsabilidad total" del ataque, que tildó de "plenamente justificado".
Trump anunció esta semana una nueva propuesta de alto el fuego, que describió como su "última advertencia" a Hamas para acatar la tregua. Un alto cargo del grupo palestino calificó la iniciativa de "humillante documento de rendición", pero señaló que debatirían la propuesta y responderían en cuestión de días. En agosto, Hamas había acatado la propuesta de Qatar y Egipto para alcanzar un nuevo alto el fuego, pero la iniciativa hizo borrajas ante el silencio de la parte israelí.
Qatar alberga la oficina política del grupo desde 2012, cuando la milicia decidió abandonar Siria tras su desacuerdo con la ofensiva militar de Bashar Asad contra su población. Su acogida permitió a Qatar crear un canal de comunicación entre la milicia, Estados Unidos e Israel, para gestionar la gobernación de la Franja de Gaza, en manos de Hamas desde 2007.
Desde el país árabe se pagaban los salarios de los funcionarios públicos, así como el envío de fondos para gestionar las infraestructuras del enclave, bloqueado por tierra, mar y aire por Israel desde que el grupo palestino asumió el poder en Gaza. Desde octubre de 2023, Doha ha ejercido un gran papel mediador entre Hamas e Israel para la liberación de rehenes israelíes, así como negociar un alto el fuego. Las autoridades israelíes han lanzado mensaje contradictorios sobre Qatar a lo largo de la guerra, por un lado confiando en el papel mediador del país árabe, pero cuestionando a su vez su capacidad para presionar a Hamas. Por su parte, Doha suspendió en 2024 su papel mediador ante las presiones, pero lo retomó poco después. Ahora tras el ataque contra su soberanía, las autoridades han suspendido de nuevo su papel mediador en las negociaciones, según la emisora Al Arabiya, aunque por el momento no hay confirmación oficial.
A principios de mes el ejército israelí confirmó la muerte de Abu Obaida, portavoz y uno de los rostros más conocidos de Hamas, en un ataque en la Franja de Gaza. En el último año el ejército israelí ha abatido a los principales líderes del grupo armado palestino en bombardeos en la Franja de Gaza -contra el líder Yahya Sinwar y el jefe del brazo armado, Mohamed Deif- pero también en ataques selectivos en suelo extranjero, como Ismail Haniyah, asesinado durante una visita oficial en Teherán.
Condena regional
Tras el ataque en Doha, la milicia hutí de Yemen -que apoya a Hamas contra Israel en alianza con el Eje de Resistencia- alertó a los países de la región para que actúen contra el Israel antes de que el conflicto se expanda a toda la región. "Lo ocurrido en Doha se repetirá y con mayor frecuencia en el resto de paísessi no nos unimos todos para enfrentar la amenaza sionista", declaró el jefe del consejo político del grupo, Mahdi al Mashat.
Los países de la región condenaron el ataque israelí, que calificaron de "irresponsable" y alertaron sobre los peligros de sumir a todo el territorio en el conflicto. Uno de los primeros líderes en reaccionar fue el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán, que calificó el bombardeo de "acto criminal", en una llamada con el emir catarí, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani. Por su parte, Emiratos Árabes Unidos (EAU), aseguró que la acción israelí constituye una "escalada irresponsable" y una "violación flagrante" de la soberanía catarí. Por su parte, Turquía aseguró que Israel "ha adoptado su política expansionista en la región y el terrorismo como política de Estado".
Por otro lado, el Papa León XIV dijo que "la situación es muy grave", mientras que el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, afirmó que "todas las partes" deben trabajar para lograr "un alto el fuego permanente".