El sistema solar se está desplazando hasta 3 veces más rápido de lo estimado

Nov 17, 2025 - 12:00
El sistema solar se está desplazando hasta 3 veces más rápido de lo estimado

Un equipo de investigadores ha calculado que el sistema solar podría estar desplazándose por el Universo hasta tres veces más rápido de lo que se estimaba anteriormente. ¿Hacia dónde vamos con tanta prisa? Aunque la pregunta puede parecer broma, averiguar la velocidad y la dirección en la que se mueve el sistema solar es fundamental para tener un mejor entendimiento de nuestro lugar en el cosmos, aunque eso implique derrumbar un poco el modelo estándar de la cosmología (el modelo tradicional que, desde hace décadas, ha explicado la estructura, composición y evolución del Universo, pero que no deja de ser cuestionado).

Astrónomos de la Universidad de Bielefeld (en Alemania) primero analizaron la distribución de las llamadas radiogalaxias, aquellas galaxias que son capaces de emitir ondas de radio particularmente intensas y que pueden ser detectadas por nuestros radiotelescopios, no obstante las enormes distancias que nos separan de estas (porque las ondas de radio pueden penetrar el polvo y el gas que oscurecen la luz visible, una considerable ventaja sobre los telescopios ópticos).


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Los científicos se apoyaron en tres de los mejores y más extensos mapas del cielo en radio: LoTSS-DR2 (del Array de Baja Frecuencia, o LOFAR), RACS-low (desde el telescopio ASKAP en Australia) y NVSS, uno de los catálogos clásicos elaborados por la Very Large Array (VLA) en Estados Unidos. Estos censos contienen millones de galaxias, muchas de ellas a gran distancia.

A través de estos instrumentos fue posible realizar por primera vez un conteo preciso de radiogalaxias, y así medir la anisotropía, o el “dipolo”, un patrón direccional que aparece en la distribución de galaxias observadas en radio. Según el modelo cosmológico estándar, este dipolo debería deberse casi por completo a nuestro movimiento a través del espacio: al desplazarnos, la aberración y el efecto Doppler hacen que veamos un ligero exceso de fuentes en la dirección de viaje y un déficit en la contraria.

Pero el nuevo estudio encontró algo que sorprendió a los investigadores: el dipolo medido en radio es 3.7 veces más grande de lo que predice el modelo estándar. Y la discrepancia no es pequeña: alcanza una significancia estadística de 5.4 sigma (σ), lo cual, en términos científicos, es demasiado grande para ser ignorado. “Nuestro análisis muestra que el sistema solar se mueve más de tres veces más rápido de lo que predicen los modelos actuales”, dijo Lukas Böhme, autor principal del estudio, mediante un comunicado emitido por la universidad. “Este resultado contradice claramente las expectativas basadas en la cosmología estándar y nos obliga a reconsiderar nuestras suposiciones anteriores”.

El cosmólogo Dominik J. Schwarz, coautor del estudio publicado esta semana en Physical Review Letters, hizo eco de esta opinión: “Si nuestro sistema solar se mueve realmente a esta velocidad, debemos cuestionar supuestos fundamentales sobre la estructura a gran escala del universo. Alternativamente, la distribución de las radiogalaxias podría ser menos uniforme de lo que creíamos. En cualquier caso, nuestros modelos actuales se ponen a prueba”.

Hacia nuevos análisis

No obstante el entusiasmo de los investigadores por la posibilidad de derribar un pilar de la astronomía, en el estudio se muestran más cautos. Este tipo de mediciones puede verse afectado por multitud de efectos sistemáticos: desde variaciones en la calibración del brillo de las antenas hasta irregularidades en la cobertura del cielo. Para mitigarlos, el estudio descarta catálogos con comportamientos anómalos y utiliza simulaciones que reproducen las limitaciones reales de cada survey.

Aun así, la coincidencia entre catálogos independientes, observados con distintos telescopios y técnicas, sugiere que el efecto es robusto. Los resultados también confirman observaciones anteriores de cuásares, los núcleos galácticos extremadamente brillantes y distantes, alimentados por un agujero negro supermasivo que devora materia y libera enormes cantidades de energía. El mismo efecto inusual se ha detectado en datos infrarrojos, lo que sugiere que no se trata de un error de medición, sino de una característica genuina del universo.

Próximas sondeos como LoTSS-DR3, EMU y los primeros mapas del Square Kilometre Array (SKA) permitirán confirmar la anisotropía con todavía mayor precisión. Si la discrepancia persiste, podríamos estar ante una señal temprana de que nuestra comprensión del cosmos necesita una revisión profunda.